Queda claro que los emprendedores y emprendedoras no tienen horario ni fecha en el calendario, ya lo dice la canción. Queda claro que en el curso insistimos que los profes tienen que observar y explorar todo el tiempo. Y también debería quedar claro la propuesta de compartir para mejor vivir. Por eso Pachi, nuestro alumno aventajado, dedició sacrificarse y no volar con el resto del grupo la tarde del viernes. ¿Por qué? Pues sencillo, para desandar el camino del miércoles y volver al Mirador del Río. Con perseverancia emprendedora esperó a que la niebla se fuera y comprobó que al otro lado se divisa La Graciosa. Y nos manda comprobación fotográfica, lo que hará que su nota final suba unas décimas. ¡Así se trabaja!
Gracias. ¡Aupa Pachi!
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